Las huellas del tiempo nos llevaron aquel día hasta una antigua estación de tren impresionante. El inmueble se encontraba en condiciones no muy buenas, ya que nosotros no eramos los primeros por desgracia en haber pisado aquel recóndito lugar...
A pesar de dicho estado de conservación nosotros al menos decidimos no tocar ni la mas mínima mota del polvo que creaba aquel ambiente y dejar todo lo que quedaba en su lugar sin dañarlo, asi mismo fieles a nuestro código, decidimos no desvelar la localización para evitar un mayor deterioro. A pesar de todo eso no nos impidio sacar unas "buenas" fotos. No es necesario mostrar fotos del interior ya que... en fin no merece la pena.
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